El futuro de Europa depende de la educación, la investigación científica y la innovación. Por ello la gestión por parte de los gobiernos de esta materias es crucial a la hora de salir airosos de cualquier situación problemática.
Los servicios públicos sanitarios y de seguridad social son, junto a la educación, la base del estado del bienestar. Pero para mantenerlo estos ámbitos deberían regirse por el sentido común y no por ideas políticas o económicas, independientemente de la crisis o la cantidad de personas que viven en una nación.
Es mucho más fácil que un país con pocos habitantes tenga mayores prestaciones y una más correcta gestión de los servicios públicos que un país grande. Pero el número de habitantes no es lo único que nos diferencia.
El sistema educativo finlandés puede darnos claves o ideas para tratar de mejorar el que tenemos en España, si es que algún día los gobernantes se dan cuenta de que es fundamental que todos los ciudadanos tengan las mismas oportunidades para poder desarrollarse, y los ciudadanos se conciencian de que es necesario aprovecharlas y valorarlas para que todos ganemos en calidad de vida.
1.- La escolarización no es
obligatoria hasta cumplidos los siete años. Los alumnos empiezan a leer y a
escribir a esta edad y, sin embargo, su nivel académico es envidiable. Apenas
hay repetidores. El fracaso escolar no llega ni al 1%, mientras que en España
casi el 30% de alumnos no termina la educación obligatoria
2.-Los profesores son muy
respetados y considerados por la sociedad finlandesa. Para estudiar magisterio
piden una nota muy alta y la carrera dura cinco años. Hay miles de solicitudes,
pero solo aceptan a los mejores. Los estudiantes universitarios reciben entre
400 y 500 euros al mes como ayuda, incluso un sitio en un piso en la ciudad
universitaria.
3.-No existe el sistema de
oposiciones. Solo con la carrera y las prácticas te pueden contratar en
cualquier colegio público. Cuando acaban la carrera trabajan durante seis meses
en una escuela con la tutela de un profesor veterano en las aulas. Este les
supervisa el programa de la clase antes de empezar y después les indica qué
pueden corregir o mejorar.
4.- Durante las clases de
referencia, existe la figura del ayudante, que acompaña a los alumnos que lo
necesitan para que no se queden atrás. Los niños que requieren apoyo en alguna
materia van a un aula especial de dicha materia, donde se les enseña
exactamente lo mismo que en la clase habitual, pero en un grupo más pequeño.
También, a veces, se adelantan los temas de la semana próxima como preparación.
5.- Los idiomas son muy
importantes. Los niños aprenden inglés, sueco (segunda lengua oficial del país)
y otro idioma más desde los primeros años de escolarización.
6.- Después de cada 45 minutos de clase hay 15 minutos de recreo.
Los niños salen siempre al patio, independientemente de las condiciones
atmosféricas.
7.- Solo existen veintisiete colegios
privados en todo el país, esto es, menos del 1% del total de centros escolares.
Todas las escuelas, públicas y privadas, son gratuitas para evitar la
marginación y las diferencias sociales. Durante los primeros tres años, los
padres reciben unos trescientos euros al mes como ayuda para cuidar a sus
hijos, y las madres tienen tres años de excedencia. Cuando esta acaba vuelven a
su trabajo anterior con todas las prestaciones que tenían.
8.- Finlandia cuenta con una de
las mayores renta per cápita de Europa. De cada cien euros de su PIB destina
seis a educación. No existe el analfabetismo desde hace cien años. Finlandia
tiene el mayor número de libros por habitante del mundo. Tiene 5.300.000
habitantes.
9.-Al margen de los cambios de
gobierno, mantienen el mismo sistema educativo desde los años setenta. Para
mantener todas las prestaciones sociales los impuestos que pagan los
finlandeses también son más altos que los que pagan sus vecinos europeos de
media.
10.- En todos los colegios los
profesores cuentan con el apoyo de psicólogos y trabajadores sociales. Estos
identifican situaciones de acoso, angustia, depresión o dificultades en las
familias de los alumnos. Si es necesario deciden enviar a los alumnos con
problemas a centros específicos.
11.-La escuela se preocupa del
bienestar tanto físico como psíquico del alumno. Desde allí los derivan incluso
al dentista, una atención que en Finlandia es gratuita. Su principio es la
prevención. Tienen una reunión con cada alumno una vez al año, en la que le
hacen todo tipo de análisis y reconocimientos médicos, pero sobre todo charlan
sobre la comida, el deporte…
12.-Todos los niños comen en el
colegio. La comida, el transporte, los libros y el material escolar son
gratuitos. Después del turno de comida para los más pequeños, la cocina se
convierte en un aula más, puesto que es una asignatura obligatoria para algunos
cursos. Hay incluso talleres de carpintería…
13.-La guardería depende del
gobierno de la ciudad y se paga según la renta que tengan los padres e incluye
desayuno, comida y merienda. Cuando empiezan el colegio se intenta que
compartan clase con los mismos niños con los que iban a la guardería.
Hola
ResponderEliminar-Para mí el segundo punto sería el primer paso, sin el cual no podría darse un sistema educativo así.
-El noveno punto es fundamental. No se puede cambiar tanto de sistema educativo como se hace aquí en España.
-El sexto punto deja en evidencia la forma en que se nos trata aquí, como si fuéramos máquinas en una fábrica. Hay un interesante vídeo al respecto: Changing Paradigms, de Ken Robinson.
-Tengo serias dudas acerca de la no existencia del sistema de oposiciones... aquí en España, un país en el que se mama desde la infancia la idea de ser enchufado en algún sitio.
En Youtube se puede encontrar un reportaje en tres partes sobre el sistema finlandés, que creo que complementa bastante bien tu entrada: Primera, segunda y tercera parte.
Un saludo.